Para evitar que los niños, curiosos por naturaleza, se adentren en el mundo en línea en sitios o aplicaciones que puedan generar un posible ataque, es importante utilizar herramientas de monitoreo.
Se recomienda utilizar una contraseña diferente a las demás y no utilizar datos personales como nombre o fecha de nacimiento en la misma. Asimismo, lo ideal es que no tenga menos de 16 caracteres.
Descargarlas solo del sitio oficial y para dispositivos móviles/tabletas hazlo directamente de la tienda oficial de cada sistema operativo. Revisa los permisos y configuración requeridos antes de su instalación.